Con su talento fuera de serie, Charly rompió esquemas, desafió a la censura y puso en palabras lo que muchos no se animaban a decir. Desde Sui Generis hasta Serú Girán, pasando por su etapa solista llena de himnos inolvidables como Rezo por vos o Nos siguen pegando abajo, su música sigue viva y sigue marcando generaciones.
A lo largo de su carrera ganó un premio Grammy, seis Carlos Gardel y decenas de reconocimientos más. En 2010 fue declarado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, pero para millones ya era eso mucho antes: un símbolo de libertad, locura y creatividad.
Hoy, cada vez que alguien toca un piano desafinado o canta contra el sistema, hay un poquito de Charly ahí.